Irresponsable, López Obrador regala  miles de millones de pesos con reservas del FEIP

Por Claudia Guerrero Martínez

Andrés Manuel López Obrador, con la necedad de hacer Informes trimestrales, de festejo de su candidatura, triunfo en las urnas, toma de protesta, cumpleaños y año de gestión como Presidente de México, este domingo dio un nuevo Informe a la ciudadanía, para describir sus acciones y lo más importante, los apoyos a adultos mayores, niños con discapacidad, becas, agricultores, campesinos, ejidatarios y cafetaleros, entre otros, en un sinfín de programas sociales entregados por el ejército de Servidores de la Nación. Se observó no hablar con acento costeño, pero sí pausado, para no equivocarse, con un halo de temor en este atípico Informe de Actividades.

Sobre las cifras de inseguridad, aseguró puntualmente que van a la baja. Algo que nadie le cree. En el tema de Salud, volvió a acotar que le dejaron un sistema de Salud en ruinas, pero el INSABI creado por él, no tiene reglas de operación adecuadas y claras.

Jamás advirtió, que desde hace un año, López Obrador usó gran parte de las Reservas y la administración de Enrique Peña Nieto había dejado 300 mil millones de pesos en el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP). Al final de este año, se prevé, quedarán sólo 30 mil millones. En el 2014, México tenía reservas de $43 mil 979 millones de pesos y en el 2019 se contabilizaban $158 mil 544 millones de pesos, siendo que en el 2020 llegará en $30 mil millones, según  estimación establecida en los Precriterios de Política Económica para 2021 de la Secretaría de Hacienda y la fuente es la misma SHCP… Y esto explica la renuncia de Carlos Urzúa, quien aseguró, no ser  cómplice de una debacle en México.

Se asegura, que en  la embriaguez del triunfo, López Obrador tomó dinero de estas reservas,  por cerca de $125 mil millones de pesos, del Fondo de Estabilización Petrolera y esto fue en el 2019,  para regalarlo en presuntos programas sociales y becas a ninis. Y es dinero que actualmente hace mucha falta.

Reconoció, que no detendrá la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía, llamado Felipe Ángeles y que va conforme a lo proyectado, al igual que la Refinería Dos Bocas en Tabasco y el 30 de abril, presuntamente arranca la construcción del Tren Maya. Mientras, en infinidad de hospitales, empleados hospitalarios, médicos y enfermeras  realizan manifestaciones por la falta de equipo epidemiológico y pruebas para detección de la pandemia de Coronavirus.

Regalará dinero, sin informar de dónde saldrá estos recursos…

Anunció que habrá protección y amparo en la quincena de diciembre del 2020 a  todos los pobres y tendrán acceso a un programa social. Becas  y apoyos a adultos mayores, niños y adolescentes de todos los niveles, que se contabilizarán  en más de 20 millones de beneficiados.

Asegura que el Gobierno se está apretando el cinturón y bajarse los sueldos de los servidores públicos y los aguinaldos de los funcionarios federales, cuando los hijos del Presidente de México han crecido en sus negocios entre  ellos una chocolatera, una  cervecera, también una  refresquera y un negocio de bienes raíces, empresas que en diciembre del 2018 no existían.

Reducir gastos de publicidad y además, se intensificará la enajenación de bienes incautados a la delincuencia organizada, mediante rifas y subastas. Adelantó que no habrá despido de trabajadores, pero se demandará más entrega, eficiencia y espíritu de servicio, con honestidad total. Algo que en el Gobierno de Veracruz, en muchas áreas, no lo realizan.

Aseguró que la inversión privada apoyará a este Gobierno Federal, con $339 mil millones de pesos, mismos, adelantó que serán donados por “empresarios comprometidos”, sin decir nombres. Agradeció a los empresarios que “voluntariamente” pararon sus actividades por la epidemia y manteniendo el empleo y prestaciones a sus trabajadores, pero nunca anunció un apoyo económico para ellos.

“La  4ª Transformación no se detendrá”, asegurando el Presidente  que hay cambios, cuando en realidad, ha decepcionado a muchos quienes creyeron en este político, quien engañó a sus votantes. Citó a los conservadores y al modelo económico neoliberal. Afirmando estar en crisis. Acusó, que ellos no comparten la misma visión de desarrollo, justicia y democracia de López Obrador.

Pintó un México que no existe y miente de forma clara y vergonzosa. Y el regalar dinero no es la solución para el desarrollo de un país, con graves problemas económicos. De forma irresponsable, con su plan de desarrollo económico que asegura existir, éste no se ajusta al modelo actual, ni conoce la realidad  que vive nuestro país.

Al final, contó historias de Benito Juárez y de otros, como si estuviese en campaña electoral, cuando los mexicanos necesitamos un discurso de certeza, solidaridad, acciones ante la pandemia y no culpar a sus presuntos enemigos, que sólo están en su mente enferma. Y termina diciendo que va a convocar a la gente para darse abrazos y besos, “cuando termine todo esto”, pues el pueblo es feliz. Un loco que no mide la magnitud del problema sanitario y la crisis económica en México.

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